El holandes errante

Zarpamos a las 5 de la tarde del embarcadero del Puerto de San Esteban, después de haber consultado minuciosamente la tabla de mareas.Cuando se asciende una ria conviene tener en cuenta la pleamar y la bajamar, pues a algunas horas no es posible la navegación, corriendo el riesgo de quedar embarrancados en el fango. Navegamos rumbo al sur. Al remontar el río, podemos observar a nuestra izquierda un antiguo desguace de barcos; lo que fueron sus columnas vertebrales descansan ahora en este cementerio marítimo. Rio arriba, después de pasar el puente de Soto del Barco, llegamos a un remanso, donde los peces nos deleitan con saltos acrobáticos. La fauna es muy rica, vemos patos y un par de cormoranes. Después, un amable pescador, nos confirma la existencia de truchas, salmones y reos. A ambos margenes del río,la vegetación es abundante de una gran biodiversidad en especies botánicas. No olvidemos que los deltas y orillas de los ríos, son  los ecosistemas mas fért...

Basta un poco de tierra y humedad para que germine un árbol. El tiempo lo hará crecer, sus raíces,  lo alimentaran y sus hojas caídas con la ayuda de los microorganismos se transformarán en humus que nutrirá el bosque.Los árboles producen oxígeno,  sin tierra no hay vida.Sin plantas no se forma la biomasa,  es todo un ciclo, simple de observar en un paseo por el bosque, pero formando un ecosistema complejo.Recordar que se necesitan muchos años y hojas para producir unos cm de tierra vegetal. Cuidemos los bosques, cuidemos la tierra.